El equipamiento industrial y los electrodomésticos en acero inoxidable están cada vez más presentes en nuestra vida cotidiana, y por ello es importante tener un método de mantenimiento específico, pero sobre todo, confiable.

Para limpiar y desinfectar productos de acero inoxidable, basta con preparar una sustancia antiséptica controlable y pasar un paño de microfibra sobre la superficie en cuestión.

En un principio y antes de aplicar las sustancias, es recomendable limpiar con el trapo humedecido únicamente con agua para finalmente pasar otro trapo seco después de haber desinfectado el área.

Procedimiento básico para limpiar el acero inoxidable

Limpiar superficies en acero inoxidable es muy sencillo. Basta con reunir algunas herramientas y suministros de origen natural, para finalmente iniciar el procedimiento de limpieza sin dañar el equipamiento.

• Aceite de oliva.
• Vinagre.
• Botella de spray.
• Paño de microfibra.

Pasos a seguir

• Suministros: Organice sus herramientas de trabajo antes de empezar.
• Identifique la dirección del acabado: Encuentra las líneas en la superficie del electrodoméstico. Dichas líneas le servirán como guía a la hora de realizar el debido mantenimiento.
• Llene la botella de spray con vinagre: Vierta el vinagre en la botella de spray para controlar la sustancia aséptica con mayor facilidad.
• Aplique el vinagre sobre la superficie: Añada el vinagre sobre el electrodoméstico y proceda a limpiar la superficie. 
• Aplique el aceite sobre un nuevo paño: Encuentre un paño totalmente seco y vierta aceite sobre él para proceder a limpiar la superficie afectada nuevamente.
• Superficies relucientes: Utilice el paño engrasado para limpiar en dirección del acabado. Hecho esto, comenzarás a ver como desaparecen las manchas.
• Paño seco: Para finalizar, pase un paño seco en dirección del acabado para eliminar posibles residuos y pulir la superficie que acaba de lubricar.

Procedimiento de limpieza para manchas más difíciles

Para manchas más difíciles, conviene llevar a cabo métodos más rigurosos a la hora de limpiar productos de acero inoxidable. Un producto orgánico o hidrocarbonado resulta útil como limpiador de acero inoxidable, de manera que será necesario aplicar dicha sustancia si la maquinaria exhibe manchas realmente complicadas en su superficie.

• Marcas de huellas: Para eliminar las huellas se recomienda lavar con jabón, limpiar con agua fría y finalmente, secar con un paño de microfibra.
• Manchas por óxido y calentamiento: Utiliza algún cepillo con cerdas no metálicas y una sustancia orgánica para eliminar el óxido físicamente. Rasca en dirección del acabado, aclara con agua fría y por último, seca con un trapo suave.
• Aceite y grasa: Para eliminar las grasas, lava con un producto hidrocarbonado como el alcohol y después añade jabón y agua para erradicar las bacterias.
• Pintura: Recurre a los disolventes de pintura para erradicar este tipo de manchas. Luego aclara con agua fría y termina secando con un trapo suave.
• Cal: Para el cal utilice vinagre al 25% y limpie con agua y jabón después agregar la solución. Después de eliminar los restos de jabón, proceda a secar con un paño.
• Adhesivos: Moje los adhesivos y las etiquetas con agua caliente enjabonada. Saque la etiqueta y añada jabón y agua para limpiar la zona para finalmente limpiar con agua caliente y un paño seco.

Consideraciones a la hora de limpiar el acero inoxidable

• Siempre utilice protección a la hora de limpiar: guantes, mascarillas y de ser posible, gorro para el cabello.
• Evita las sustancias y herramientas abrasivas que puedan afectar la superficie del acero.
• Evita los limpiadores de acero inoxidable que contengan sales cuaternarias.
• No utilices ácido clorhídrico para limpiar electrodomésticos o equipo industrial.
• Limpie el óxido y la suciedad apenas sean detectados.
• Utilice productos suaves en las áreas pequeñas para estudiar el resultado obtenido antes de aplicar todo el producto sobre el equipo.
• Use agua caliente para eliminar grasas.
• Siempre recurra al agua limpia y fría para finalizar el proceso de limpieza.
•  No usar cantidades excesivas de jabón o detergente.
• Si recurre a la técnica de pasivado como método de limpieza, recuerde iniciar con el proceso básico antes de recurrir al tratamiento de pasivación.  

¿Qué es el pasivado?

El pasivado es una técnica de mantenimiento que se lleva a cabo con productos químicos. Por su naturaleza, el tratamiento de pasivación se realiza en equipos industriales que necesitan renovar la capa pasiva que protege al acero inoxidable.

En este sentido, la pasivación tiene un papel fundamental como método de mantenimiento, ya que permite al oxígeno uniforme penetrar la superficie del acero para contrarrestar el nivel de corrosión.

Si bien el metal puede adquirir una película de óxido que puede funcionar como agente protector, con el tiempo, agentes contaminantes como el polvo y las partículas de hierro pueden reducir la efectividad de la película de óxido.

Los sulfuros propios del acero inoxidable también representan una problemática a largo plazo. Cómo se utilizan para mejorar la maquinabilidad del metal, con el tiempo pueden formar virutas que corroen la superficie de la maquinaria.

Por esta razón se recurre al proceso de pasivación para mejorar la resistencia a la corrosión. Después de la limpieza básica, los baños de pasivación son capaces de eliminar la contaminación a gran escala, aumentando la vida útil del equipamiento industrial en acero inoxidable.

Baños de pasivación

Para el tratamiento de pasivación existen tres opciones disponibles de acuerdo al grado de acero inoxidable y a las directrices que maneje la empresa interesada en ejecutar dicho procedimiento:

• Ácido nítrico.
• Ácido nítrico con dicromato de sodio.
• Ácido cítrico.

La maquinaria industrial de acero inoxidable cubierta en cromo o níquel puede pasivarse en un baño de ácido nítrico porque es lo suficientemente resistente como para tolerar el baño químico que se emplea como método de pasivación.

Sin embargo, los grados de acero menos resistentes deben pasivarse con dicromato de sodio para lograr el efecto oxidante en el ácido nítrico. El ácido cítrico, por su parte, es una opción noble que ciertos fabricantes aprovechan para evitar el uso de las soluciones que contienen ácidos minerales o dicromato de sodio.  

Una vez se complete el proceso de pasivación, debe enjuagarse el área con agua para neutralizar los restos de ácido en las superficies. Todo baño de pasivación debe ser ejecutado por un equipo familiarizado con dichos procesos, ya que el manejo y la aplicación del tratamiento requiere de protección y conocimiento sobre los estándares industriales.

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